Cierra los ojos. Imagina cómo sería el hotel de tus sueños. Pues sigue leyendo porque te vamos a dar unas cuantas ideas para que sepas cómo serán los hoteles del futuro. Las nuevas tecnologías están cambiando todos los sectores. Están modificando todos los trabajos y, por supuesto, el sector hotelero no iba a ser menos.
El primer avance que te ofrecemos quizás no sea del gusto de todo. Se trata de la recepción virtual. Desde que existen los hoteles, la recepción ha sido el rostro y el corazón de un establecimiento. Mucha gente se siente ya acogido al entrar por la puerta. Ni siquiera el aumento de las reservas en línea y de la tecnología inteligente ha tenido un impacto muy grande sobre la recepción, tan digna de confianza. Sin embargo, muchos hoteles apuestan ya por la recepción virtual.
El ejemplo lo tenemos en Dubai. Allí un establecimiento de cinco estrellas de Oriente Medio pretende eliminar las colas en los vestíbulos permitiendo a los clientes que realicen el registro de llegada con tan solo pulsar unos botones en una tableta y dándoles un código QR con un enlace a un vídeo que explica todo lo que necesitan saber. ¿Qué te parece? Hay otros establecimientos, también de cinco estrellas, que apuestan por el trato. Así lo hacen en Mercer Barcelona, que recomiendan mejor el trato con el cliente, según aseguran, es una relación de confianza que nunca se debe acabar.
Este hotel de Dubai maximiza el espacio mediante módulos prefabricados que se pueden situar en cualquier lugar de su edificio, usando cuartos de baño comunes y ofreciendo un solo tamaño de habitación Así logran un mayor margen de escalabilidad, lo que implica que pueden ofrecer privacidad y precios bajos a la vez. Esto les hace ocupar un nicho de mercado dirigido a los viajeros que se preocupan por el dinero, pero a quienes no les gusta el elemento comunal de los hostales. A mí no es una ida que no me gusta.
Habitaciones para una persona
En lo que sí estoy de acuerdo es en esta idea. Muchos hoteles alquilan ya habitaciones individuales a gente individual. Cuando reservas una habitación en este hotel, puedes elegir la planta, el tamaño de la habitación, las vistas y muchas otras variables. Tras la reserva, consigues un número de habitación, así que puedes saltarte la recepción e ir directamente a tu habitación usando la aplicación del hotel. Vas a conseguir que te salga más barato, eso sí, la habitación será más pequeña y con menos comodidades.
Digitalización es la palabra estrella. Te vas a encontrar un montón de aspectos cotidianos que irán gracias a la tecnología. No te extrañes si un día llamas a la recepción y un robot te trae la almohada que has pedido porque la tuya era muy baja. A través de la voz o con un único dispositivo podremos calcular las horas de sueño, conocer el estado de descanso alcanzado o contratar servicios del hotel.
Se acabó el tener que reservar la habitación con mucha antelación, sino que se podrá estar frente al hotel, abrir el móvil, la tableta o el reloj y, en pocos clics y gracias a la geolocalización, estar registrado. Ah, y se acabó hacer el check-in en el mostrador: todo desde el dispositivo portátil.
Todo en el móvil
Tu móvil será tu identidad, y servirá también para abrir la puerta de tu habitación. Al entrar en la habitación, se acabaron los controles manuales de todos los elementos. Con una tablet (o incluso el móvil del cliente) se podrán levantar y bajar las persianas, encender o apagar las luces, poner o no la calefacción/aire acondicionado. Es decir que vamos a estar sometidos a la tecnología. Desde esa tableta se podrán realizar muchas otras opciones, como reservar una mesa para comer, comunicarse con la recepción, pedir que te suban el desayuno al día siguiente…Y así con todo.
Como ves, muchos avances son para hacernos la vida más fácil, pero también para reducir costes a la empresa. Lo que provocaría más gente a la calle. Además noto que se pierde la humanización del hotel. ¿Qué te parece? Y ahora, después de leer este artículo, ¿crees que los hoteles del futuro se parecen a lo que tú habías pensado? Se admiten comentarios.