En estos tiempos de crisis en los que resulta cada vez más complicado encontrar un puesto de trabajo por cuenta ajena, la opción a la que están recurriendo ya muchos españoles pasa por montar su propio negocio. Una buena solución es decantarnos por las franquicias, que nos ofrecen un proyecto desarrollado y nos ofrecen un soporte y asesoramiento integral.
Las franquicias no son solo una oportunidad de negocio para aquellos que se encuentran en el paro, también son una buena oportunidad de inversión para aquellos que tienen unos ahorros. En el portal Top Franquicias podemos informarnos acerca de las mejores franquicias de España, así también como de las franquicias más rentables en la actualidad.
Otra de las cosas buenas que tiene este tipo de negocios es que contamos con una gran variedad de empresas por las que decantarnos. Así, podemos adaptar nuestros gustos también al que será nuestro futuro empleo y disfrutar de la experiencia. Las oportunidades van desde franquicias de nutrición como Cerezo Sport hasta franquicias de ropa infantil como Grupo Reprepol, pasando por franquicias de autoservicio como WashUp y casi todas las que se nos puedan ocurrir. Realmente, si nos paramos a pensar, en cualquier paseo que demos por el centro de nuestra ciudad, podemos encontrarnos con muchos negocios de este tipo: restaurantes, talleres, perfumerías, un centro de estética, joyerías, tiendas de ropa, lavanderías, establecimientos de venta de gominolas, librerías, zapaterías… Si nos suena de haberlo visto en otra localidad, es muy probable que el dueño no sea la misma persona, sino que se trata de alguien que ha alquilado los derechos de la marca.
Una vez nos hayamos informado acerca de qué tipo de sector nos gusta más o aquel al que podemos acceder bajo el método de las franquicias según nuestros ahorros, debemos ponernos en contacto con el franquiciador. Es fundamental que estudiemos bien nuestras posibilidades de inversión, ya que no solo tendremos que poner en marcha el negocio, sino que las franquicias aportan un canon económico a la central por usar la marca. A veces se trata de un aporte inicial, y en otros casos también se llevan un porcentaje de los beneficios, por lo que es bueno saber de qué colchón disponemos y hasta qué punto podemos lograr financiación exterior.
Dicho esto, es conveniente no solo establecer una reunión con el franquiciador, sino también visitar otros establecimientos de la misma marca o incluso las oficinas centrales de las empresas para así meternos de lleno en la que será nuestra futura aventura empresarial. Esta toma de contacto es muy importante, ya que aquí podemos conocer a otros trabajadores, personas que han tenido la misma experiencia que nosotros buscamos… Todos ellos serán de buena ayuda a la hora de asesorarnos y comentarnos más sobre el negocio. Aquí podemos llegar a descubrir tanto ventajas como inconvenientes en los que no se nos había ocurrido reparar.
Si nos gusta el modelo de negocio y estamos de acuerdo con las condiciones, es probable que en la primera toma de contacto con el franquiciador podamos firmar un preacuerdo y demos una señal de ese canon que debemos pagar por tener una franquicia, un monto económico que decide la marca en cuestión. Se trata de un momento importante, ya que con la firma de este preacuerdo y ese pago podemos reservarnos la zona en cuestión en la que queremos operar, aunque todavía no hayamos encontrado el local que se adapte a nuestras necesidades.
Es probable que para encontrar ese espacio para nuestro establecimiento la propia marca franquiciadora nos exija unos requisitos mínimos en cuanto a metros, pero también nos asesore o aconseje acerca del mejor lugar para implantar el negocio. Algunas de las centrales se encargan ellas mismas de llevar a cabo una selección de los mejores locales que luego ofrecen al franquiciado. No debemos descuidar esta etapa. Ejemplo de ello es una de las marcas más importantes del mundo: Inditex. Existen estudios que hablan de cómo el propio local es la mejor publicidad del negocio. En lugar de las escasas apariciones en anuncios de prensa o catálogos de moda, los establecimientos de Amancio Ortega son siempre los mejor posicionados en todas las ciudades.
Una vez completados estos primeros pasos, debemos firmar el contrato, que tendrá lugar cuando se lleve a cabo el pago de ese canon inicial del que hablábamos. Una vez constituida la sociedad, comenzaremos ya a adecuar el establecimiento y nos formaremos antes de iniciar la actividad. Como en el resto de negocios, tendremos que buscar personal en caso de que sea necesario o no podamos trabajar la empresa nosotros mismos, deberemos cumplir con las obligaciones de la Administración, y un largo etcétera. Pero contaremos con el apoyo de una gran empresa detrás y, lo más importante, no será nuestro desempeño crear una imagen de marca.