El aluminio es más antiguo que el fuego. Haciendo un poco de historia, el aluminio se utilizaba en la antigüedad clásica en tintorería y medicina bajo la forma de una sal doble, conocida como alumbre y que se sigue usando hoy en día. En el siglo XIX, con el desarrollo de la física y la química, se identificó el elemento.
Su nombre inicial, aluminum, fue propuesto por el británico Sir Humphrey Davy en el año 1809. A medida que se sistematizaban los nombres de los distintos elementos, se cambió por coherencia a la forma aluminium, que es la preferida hoy en día por la IUPAC debido al uso uniforme del sufijo -ium. En el año 1825, el físico danés Hans Christian Ørsted, descubridor del electromagnetismo, logró aislar por electrólisis unas primeras muestras, bastante impuras. El aislamiento total fue conseguido dos años después por Friedrich Wöhler.
Sin embargo, como el buen vino, el aluminio ha logrado con el paso del tiempo estar en mejor forma. Tradicionalmente, este material se ha usado en diferentes actividades. Desde el transporte y la construcción hasta el envasado de alimentos y la fabricación de muebles. Su importancia es tal que tres cuartas partes de las mil millones de aluminio que se han producido hasta ahora se encuentra en uso productivo.
Aunque la demanda de aluminio se ha visto disminuida, los expertos auguran que este material puede ser clave en la lucha por un futuro sostenible. Y es que es especialmente duradero en el uso final. Un ejemplo lo tenemos en que se ha convertido en un material perfecto para las construcciones de energías renovables.
“Los sistemas de placa solar están muy relacionados con el aluminio. Ambos conceptos coinciden y dirigen sus esfuerzos a crear un medio ambiente sostenible. La energía renovable y los productos 100 % reciclables y con amplia durabilidad, como el aluminio, son fundamentales para el crecimiento sostenible y limpio de nuestro entorno”, aseguran desde Aluminios Franco, empresa que ofrece un sistema completo para la instalación y fabricación de módulos de anclaje de placa solar.
Las excelentes prestaciones del aluminio, añaden un alto valor a las instalaciones de energía solar fotovoltaica. La ligereza de este material y su amplia versatilidad hacen posible todo tipo de instalación, adaptándose a las necesidades de cada proyecto y facilitando su montaje y fabricación. Así, as infinitas posibilidades de este material, combinadas con unas excelentes características como la ligereza, dureza y durabilidad, hacen que sea un material idóneo para su uso en aplicaciones Industriales. Existe un amplio catálogo de perfiles normalizados, aplicables tanto a este sector como a cualquier otro como: carpintería, decoración, etc..
En la automoción
El aluminio también está muy presente en el sector de la automoción. Las aleaciones de aluminio, como metal conformable y resistente, no son ajenos a ser utilizadas como materiales. La aparición, evolución y futuro del vehículo eléctrico, está siendo un detonante más para buscar la reducción de peso. Y es ahí donde aparece el papel del aluminio.
En la arquitectura
En los últimos años se ha comprobado la evolución de los diseños arquitectónicos. Ahora son cada vez más modernos y con formas futuristas que requieren de materiales adaptables. Para ello se necesita un elemento que pueda ser moldeable, esto es lo que otorga al aluminio un papel de protagonista que no tiene ningún otro elemento. Sus características como la ligereza, resistencia o la ductilidad le permiten ser la solución perfecta a prácticamente cualquier problema de diseño que se plantee. De ahí que el aluminio se pueda usar en grandes estructuras, grandes edificios y grandes elementos. Como puedes ver el aluminio en un futuro a corto y medio plazo tiene larga vida.
No podemos dejar pasar de lado, el emergente aluminio transparente. Un material desarrollado por el US Naval Research Naval. Se trata de magnesio aluminado fabricado en planchas, y que destaca por una resistencia muy superior a las aleaciones actuales. El nombre que tiene no es sino porque, evidentemente, es transparente, y otros datos interesantes tienen que ver con que es muy maleable, luego se pueden crear todo tipo de formas con él.
Producción
El aluminio es uno de los elementos más abundantes de la corteza terrestre, ahora bien, también uno de los metales más caros en obtener. La producción anual se cifra en unos 33,1 millones de toneladas, siendo China y Rusia los productores más destacados, con 8,7 y 3,7 millones respectivamente. Una parte muy importante de la producción mundial es producto del reciclaje. En 2005 suponía aproximadamente un 20 % de la producción total.